El consumo de música digital se incrementó en un 8 por ciento en todo el mundo durante 2011 y supuso para la industria discográfica internacional unos ingresos de 4.000 millones de euros. El negocio digital es ya casi un tercio del total (32%) y en algunos países supera la mitad del consumo: un 52% en Estados Unidos, un 53% en Corea y más del 70% en el caso de China.
Así se refleja en la más reciente edición del Digital Music Report, el informe anual que elabora la Federación Internacional de la Industria Discográfica (IFPI) sobre el sector y que ha sido presentado esta misma semana en la sede central de Londres.
El incremento del mercado digital no ha servido para paliar las pérdidas del físico, en caída libre en buena parte del mundo, pero representa un elemento esperanzador para una industria muy duramente castigada por la crisis y, sobre todo, la piratería.
La IFPI vuelve a hacer hincapié a este respecto en el caso español, donde, según un reciente estudio de Nielsen, un 42% de los internautas visitan al menos una página al mes que ofrece contenidos ilegales. La media europea es muy inferior, el 27%.
La buena noticia a nivel global es que los usuarios se encuentran cada vez más familiarizados con los servicios legales de música digital, a través de los que se puede acceder a 20 millones de canciones con plenas garantías de calidad y seguridad. No obstante, el informe destaca la intensa actividad de búsqueda de nuevas fórmulas comerciales que sirvan a la industria para ofrecer una mejor experiencia y diversidad que los servicios ilegales al aficionado.
Las compañías creen que ambos modelos, el de acceso y uso como el de descarga, tienen un enorme potencial de crecimiento para los próximos años.
iTunes, la mayor tienda virtual, estaba presente en 22 países a finales de 2010 y terminó el pasado ejercicio en 58. Otro servicio similar, 7digital, ya es una realidad es 37 países, y Spotify, el popular servicio de música en streaming, se ha expandido a 12 mercados (Estados Unidos y buena parte de Europa).
Entre los mitos que se derrumban figura el de que la música digital ha acabado con el viejo concepto de álbum como obra integral. La venta de discos digitales (es decir, de la colección completa de canciones de un trabajo) creció un 19% en Estados Unidos, un 27 por ciento en el Reino Unido y un espectacular 71% en el caso francés.
Más llamativo aún resulta la consolidación de las suscripciones de pago como modelo de consumo digital. Los aficionados que se han abonado a estas fórmulas son ya más de 13 millones en todo el mundo, un 65% más que en 2010 (8,2 millones). Solo Spotify aporta 2,5 millones de usuarios de pago, 400.000 de ellos en Estados Unidos, donde comenzó a funcionar en julio de 2011.
Por lo demás, el artista Bruno Mars se convierte en el gran triunfador digital del año, ya que dos de sus canciones son las más vendidas a través de la red. Just the way you are ocupa el primer puesto, con 12,5 millones de descargas, mientras que Grenade obtuvo 10,2 millones de ventas digitales.
El top 10 lo completan Jennifer López (On the floor), Adele (Rolling in the deep), Lady Gaga (Born this way), Pitbull (Give me everything), Black Eyed Peas (The time – Dirty bit), Maroon 5, con su éxito Move like Jagger, y nuevamente Bruno Mars, esta vez con The lazy song. El tema más descargado de 2010 había sido Tik tok, de Ke$ha, mientras que Poker face (Lady Gaga) encabezó la clasificación digital en todo el mundo de 2009.
Redacción (Agencias)