La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) dibuja un perfil de consumo en los hogares españoles cada vez más primario y menos diversificado.
Mientras las partidas destinadas a comprar ropa, calzado, electrodomésticos o automóviles descienden, las relacionadas con la reparación de estos bienes se incrementan claramente.
No obstante, los españoles no escatiman en bebidas alcohólicas aunque cambia su hábito de consumo. Mientras que aumenta el gasto de su consumo en los hogares, se contrae su consumo en restaurantes, cafeterías o bares.
Redacción (Agencias)