El Instituto de Trastornos Alimentarios (ITA) alerta del riesgo que entraña la cercana época de exámenes para personas con trastornos de la alimentación, como la anorexia y la bulimia, al aumentar el estrés y la exigencia personal afectando negativamente en las pautas de alimentación de los jóvenes.
Según advierten, el nivel de exigencia personal y el carácter perfeccionista de estos pacientes comporta una alta intolerancia a la frustración, por lo que es habitual que en épocas de exámenes destinen gran parte de su tiempo al estudio para lograr los más altos resultados alterando así sus hábitos alimentarios.
Los expertos recuerdan que el aislamiento social se relaciona en estos jóvenes con el aumento de los síntomas depresivos y la obsesividad, por lo que recomiendan reforzar la atención sobre esto pacientes para evitar el aislamiento social y la dedicación excesiva al estudio, ofreciendo estrategias para afrontar la ansiedad y otros aspectos como el perfeccionismo, el miedo al fracaso o la tolerancia a la frustración.
Redacción (Agencias)