No es una leyenda, escuchar música alta a través de auriculares provoca daños en el oído.
Así se desprende de un estudio de la Universidad de Leicester, en Reino Unido, que ha permitido constatar por primera vez el daño del nervio auditivo que provoca escuchar ruidos persistentes o música a un volumen elevado.
Los autores reconocen que subir el volumen de la música cuando se escucha a través de unos auriculares puede suponer un daño similar al que provocaría estar cerca del motor de un jet en funcionamiento. Esto daña la capa que recubre las células nerviosas que se encargan de transmitir las señales de sonido al cerebro, la mielina, lo que puede causar sordera temporal o permanente, en caso de exposición repetida.
Los científicos han descubierto que la exposición a sonidos altos, por ejemplo de más de 110 decibelios, puede destruir este recubrimiento e interrumpir la llegada de la información al cerebro, cuando a nivel medio, un aparato de MP3 alcanza entre 85 y 90 decibelios.
Eso sí, este daño a la mielina, puede revertirse y lograr que las neuronas vuelvan a funcionar con normalidad restaurando el oído.
Redacción (Agencias)