No hace falta ir al Amazonas para descubrir un ecosistema desconocido y rico en biodiversidad, basta levantarse la camiseta y estudiar el ombligo, cuya vida se parece más de lo que podemos imaginar a la de una selva tropical.
Un grupo de investigadores de siete universidades de EEUU cultivaron y analizaron 60 muestras tomadas de ombligos humanos, en los que encontraron más de 2.300 especies de bacterias, según publican en la revista PlosOne.
Que la piel humana está habitada por billones de microorganismos no es ningún descubrimiento, pero al analizar los datos los científicos se encontraron con la sorpresa de que las bacterias presentes en distintos ombligos diferían más de lo esperado.
«Al estudiar los ombligos vimos una inquietante e inmensa riqueza de vida, el ombligo medio hospedaba alrededor de 50 especies y entre distintos ombligos encontramos miles de especies«, escribe en la revista Scientific American el biólogo de la Universidad Estatal de Carolina del Norte (EEUU) Rob Dunn, quien ha liderado el estudio.
Según la hipótesis, en las selvas hay una gran diversidad de especies de árboles, pero hay una serie de especies, conocidas como «oligarcas», que están presentes en la mayoría de bosques y son más comunes allí. El ombligo también tendría sus «oligarcas», pues solo ocho bacterias estaban presentes en más de un 70 % de las muestras tomadas en el estudio, y casi la mitad de todas las bacterias encontradas en las muestras son de esas ocho especies.
Redacción (Agencias)