El consumo moderado de cerveza es positivo para la salud, contribuye a reducir los índices de colesterol, tiene un efecto cardioprotector, mejora el sistema inmunológico y no provoca aumento de peso.
Así se desprende del estudio «Consumo moderado de cerveza. Estudio nutricional e inmunológico en humanos y en animales de experimentación» que ha elaborado el Centro de Información Cerveza y Salud, una entidad de carácter científico, que se ha presentado este mediodía en el Congreso de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen) que se celebra en el recinto de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona).
El estudio incluye los beneficios de la cerveza sin alcohol «que son los mismos que la bebida con alcohol».
El trabajo indica que la cerveza, al estar elaborada con ingredientes naturales (agua, cebada malteada y lúpulo) y contener diversos nutrientes como vitaminas del grupo B, fibra y minerales, consumida de forma moderada por adultos sanos, mejora la respuesta inmune contra patógenos externos, es decir, los agentes responsables de desarrollar enfermedades infecciosas.
Redacción (Agencias)