Como os avanzábamos hace unos días, Europe venían este fin de semana a nuestro país para dar tres conciertos en Madrid, Bilbao y Barcelona. Y como os dijimos, ahí estaríamos en el de Madrid, el jueves 27 en la Sala la Riviera.
Tras un concierto del virtuoso guitarrista Jorge Salán, las luces se apagaban para esperar a Europe. Los suecos salían al escenario con dos temas de su último disco, «Bag of Bones». Temas reconocidos por muchos de los asistentes, pero que no harían vibrar tanto a la sala como lo hizo el tercero, ‘Superstitious’, uno de los más famosos de la banda.
Una vez pasado el primer clímax, los de Estocolmo fueron intercalando hits ochenteros con canciones más actuales y con sonido más moderno, sobre todo de su último álbum. A mitad del concierto el vocalista -Joey Tempest- chapurreaba español -eso sí, con su especial carisma- asegurando que era «fantástico» tocar por «cuatra» vez en Madrid, delante de las «judidas palmeras» de la Sala La Riviera.
Tras esto, Tempest cogía la guitarra acústica para deleitarnos con uno de los himnos de Europe: Carrie. El resto de instrumentistas también tenían su protagonismo, en especial el batería Ian Haugland, quien interpretó un original solo sobre la “Obertura Guillermo Tell” de la Opera de Rossini. ‘Let the good times rock’ nos indicaba que nos acercábamos al final, y con ‘Rock the night’ los suecos nos deseaban que pasásemos una gran -y rockera- noche tras el concierto.
Y durante todo este tiempo, ¿qué pasaba bajo el escenario? A nuestro lado, en las primeras filas, el panorama era algo distinto a lo que se suele ver en un concierto de heavy metal: público en su mayor parte femenino, gritando y silbando a Joey Tempest como si no hubiesen pasado los años por el frontman que tantas pasiones levantó en los 80. Público, por cierto, muy internacional: fans italianas, club de fans de Europe de República Checa y Eslovaquia… el nombre de la banda servía, casualmente, para describir la diversidad de fans llegados de varias partes del continente.
Al igual que serviría, sin duda, «The Final Countdown» para decirnos que llegaba la cuenta atrás para terminar el espectáculo. Un espectáculo que mereció la pena ver, porque Europe no es una banda de los 80 que vive de las rentas, sino un grupo de rock que ha sabido evolucionar y satisfacer tanto a sus fans más clásicos como a los que aprecian el sonido actual de la banda.
Borja Bermúdez-Cañete