Los consumidores podrán sentarse ya a comer con mayor tranquilidad desde mañana, puesto que las etiquetas de los alimentos llevarán un «DNI» e informarán de si contienen alguno de los 14 alérgenos más comunes, al igual que lo harán todas las cartas de los restaurantes.
Las Navidades de 2014 serán más fáciles en lo que se refiere a comer sin riesgos y con los consumidores mejor informados respecto a los ingredientes.
Detallar si las croquetas llevan trazas de moluscos o crustáceos; o si un pastel contiene sésamo, avellanas, nueces, anacardos o alguno de los alérgenos más comunes será obligatorio también en los restaurantes.
En los productos constará más información que hasta ahora quedaba oculta, como el tipo de aceite específico que lleva: si es de oliva, de girasol o de palma; hasta ahora, se indicaba «aceites vegetales».
Redacción (Agencias)