La fiesta más internacional de la cerveza de Alemania ha alcanzado su primer millón de visitantes en su segundo día de actividad, tras abrir este sábado sus puertas.
La Oktoberfest de Múnich quedó inaugurada ayer con el tradicional mazazo al grifo que abre el primer barril de cerveza y hoy continúa la fiesta con las carrozas engalanadas.
Múnich espera hasta el 4 de octubre, jornada de cierre de la fiesta, a unos seis millones y medio de visitantes de todo el mundo para su popular Oktoberfest. Además, se estima que se consumirán siete millones de litros de cerveza.
El origen de esta fiesta popular se remonta a 1810, cuando en la ciudad se celebraron durante cinco días las bodas del príncipe Luis de Baviera con la princesa Teresa de Sajonia-Hilburghausen.
Redacción (Agencias)