Tras el desenlace del brexit, la dimisión de David Cameron y la llegada de Theresa May al poder hay otra cuestión que planea sobre el ambiente de los británicos. ¿El gato Larry permanecerá en el 10 de Downing Street? El animal es un residente más en la sede del primer ministro desde 2011.
«Es un funcionario público y no pertenece a la familia Cameron, así que se quedará donde está», ha asegurado un portavoz del Gobierno británico.
La tradición de contar con un gato en la casa del primer ministro se remonta a hace casi un siglo. El felino se encarga de solucionar los problemas de ratones que sufre el 10 de Downing Street. El cargo incluye un pago de 120 euros anuales y regalos procedentes de todos los rincones de Reino Unido.
Uno de los gatos más recordados es Humphrey, quien acompaño a Margaret Thatcher, John Major y Tony Blair.
Redacción (Agencias)
Fotografía: @Number10cat