Unas 4.600 parejas han acudido a una notaría desde julio del año pasado en España. Pero no para casarse, sino para todo lo contrario, para divorciarse ante notario. De hecho, tan sólo 2.300, la mitad, acudieron para contraer matrimonio.
Desde hace un año, la Ley de Jurisdicción Voluntaria permite a los notarios y a los secretarios judiciales tramitar tanto bodas como divorcios.
Para poder divorciarse, sin embargo, las parejas tienen que cumplir con una serie de requisitos. Uno de ellos es que lleven al menos tres meses casados. Pero también deben de presentarse con una separación o divorcio de mutuo acuerdo y no pueden tener hijos menores a su cargo.
De esos casi 5.000 divorcios que se han registrado en este tiempo, 1.100 han sido en Madrid, 898 en Andalucía y 576 en Cataluña. En cuanto a las bodas, solo tenemos que mirar estas comunidades en el orden inverso: Cataluña es la que más bodas ante notario ha celebrado y le siguen Andalucía y Madrid.
Redacción (Agencias)