Salimos de comprikiss por la red una semana más para encontrarnos con unas bonitas «mazorcas» rusas de alguien que no sabe ni lo que vende o una máscara de gas que resulta no ser tal. Nos hemos encontrado hasta con un armario cubista.
Salimos de comprikiss por la red una semana más para encontrarnos con unas bonitas «mazorcas» rusas de alguien que no sabe ni lo que vende o una máscara de gas que resulta no ser tal. Nos hemos encontrado hasta con un armario cubista.