La educación musical mejora el dominio del lenguaje, la coordinación motora y otras habilidades como la atención, la concentración y la memoria. Así lo asegura el director de la Escuela de Música de Brains International School, Mauricio Voto.
Un artículo publicado en “Journal of Neuroscience” revela que aquellos alumnos que habían recibido dos años de formación musical tenían respuestas cerebrales más sofisticadas y un lenguaje más desarrollado que los que no habían cursado dichos estudios.
También incrementa la memoria y la creatividad ya que al estudiar un instrumento, se ponen en juego la memoria visual, la memoria muscular o gestual y la memoria auditiva, que interactúan en un complejo proceso intelectual.
Redacción (Agencias)