Ir de concierto siempre es una experiencia inolvidable, pero además según un estudio nos hace más felices.
Un nuevo estudio realizado en Australia ha constatado que la mayoría de las personas que asisten regularmente a conciertos se sienten en términos generales más felices con sus vidas. El estudio resalta que aquellos que asistieron a cualquier tipo de experiencia musical colectiva, ya fuera un gran festival o sencillamente una noche bailando, tenían niveles más altos de satisfacción con sus vidas. Destacan además que hacerlo en grupo favorece estas sensaciones, ya que escuchar música de forma regular no provoca el mismo efecto de bienestar.
Redacción (Agencias)