Los perros y los monos capuchinos observan cómo los seres humanos interactúan entre sí y reaccionan menos positivamente a aquellos que están menos dispuestos a ayudar o compartir.
Es la conclusión de un equipo de investigadores de la Universidad de Kyoto, cuya investigación ha sido publicada en la revista Neuroscience & Biobehavioral Reviews.
En los experimentos, los animales mostraban un clara desinclinación a aceptar interactuar con una persona que se negó a ayudar a abrir una lata o a devolver las pelotas, en comparación con aquellos que eran útiles o justos o eran actores pasivos.
Según los investigadores, esto demuestra que los monos capuchinos y los perros hacen juicios sociales de manera similar a los bebés humanos, y que incluso podría ofrecer pistas sobre el desarrollo de la moral en los seres humanos.
Redacción (Agencias)