Los insectos, pero también el oro y las delicias saladas, renuevan la propuesta de Italia para sus típicos productos navideños conocidos en todo el mundo: el Panettone y el Pandoro.
La tradición se une en estas fiestas navideñas a la innovación y por ello los insectos se cuelan en la receta de uno de los dulces navideños más típicos de Italia, el «pandoro», cuya harina se ha mezclado con gusanos de seda en un postre que ha sido recibido en el país con inicial desconfianza pero con curiosidad.
Paralelamente, una nueva versión del «panettone» ha sido ahora cubierta con hojas de oro de 18 quilates desde el corazón de la costa amalfitana (sureste). Esta lujosa versión se han producido solo diez piezas ya que su precio, efectivamente, no es para todo los bolsillos: 120 euros por kilogramo.
Las ganas de cambio también se han apoderado de los tradicionales postres navideños y el «panettone» se propone también en versión salada para también degustar como entrante en una cena o comida navideña.
Redacción (EFE)