¿Una cara vale más que mil palabras? La respuesta sería sí, a la vista de las cifras que arroja el mundo de los emojis: más de 700 millones se comparten cada día en Facebook y 250 millones al mes en Twitter.
Todo comenzó en 1990, cuando la operadora móvil japonesa NTT creó una colección de 176 dibujos que se convertirían en el origen de este lenguaje universal en internet, aunque no fue hasta 2008 cuando Apple lanzó su primer catálogo de estos dibujos y dieron el salto a la conversación mundial. En total hay 2,823 aprobados por Unicode.
Según un estudio de la consultora Brandwatch, estos iconos sirven para tomar el pulso al ambiente: los iconos de alegría se disparan en Navidad y Año Nuevo, mientras que los de miedo tuvieron su máximo histórico en el período previo al referéndum de Reino Unido sobre su pertenencia a la UE.
Aunque la cara llorando de risa y el tradicional corazón rojo son los más usados, según los datos de varias redes sociales, también hay sitio para excentricidades para todos los gustos: zombis, malabaristas, dinosaurios, unicornios o comidas como la paella o un cuenco de ramen, un tipo de sopa de fideos japonesa.
Redacción (EFE)