Ver cachorros de cualquier animal reduce el apetito de las personas por la carne, especialmente las mujeres, según han evidenciado un equipo de psicólogos de la University College London (Reino Unido) en un trabajo publicado en la revista ‘Anthrozoos’.
A juicio de los expertos, el hecho de que las mujeres sean las que menos apetito tengan cuando ven un cachorro puede explicarse en le hecho de que ellas suelen asumir el papel de cuidadoras y suelen tener una mayor sintonía y, por ende, mayor empatía hacia los bebés.
Además, la carne se asocia con la masculinidad y se suele asociar su consumo a la intención de aumentar la masa muscular, mientras que las mujeres tienen una actitud mucho más ambivalente hacia la carne y su identidad no está ligada a ella de la misma manera.
Redacción (Agencias)