Amy Jandrisevits fabrica muñecas con las mismas discapacidades y peculiaridades físicas que sus futuros destinatarios: niños «diferentes» con alguna deformidad física. ‘Doll Like Me’ es una iniciativa cuyo objetivo es trabajar en la autoestima de estos niños ofreciéndoles un juguete totalmente personalizado con cuyo aspecto se pueden sentir identificados.
Esta mujer sabe que la apariencia de una muñeca lo es todo, especialmente para niños cuya autoestima ha sido dañada por alguna circunstancia desafortunada, ya sea por cáncer, un defecto de nacimiento o cualquier trauma que modifique su apariencia. En su trabajo descubrió que las muñecas podían proporcionar un tipo diferente de terapia para las niñas que necesitaban un impulso emocional.
Cada muñeca vale unos 100 dólares. Si los padres no pudieran afrontarlo, Amy se hace cargo de la diferencia sea cual sea, algo que se sostiene también gracias a una campaña de recaudación de fondos. El objetivo: que cada niño tenga su muñeca.
El dinero recaudado va íntegramente a la creación de más muñecas personalizadas para los niños y niñas de un hospital infantil con el que Amy se ha asociado. ‘Doll Like Me’ ha donado más de 300 muñecas y todavía hay personas en lista de espera.
Redacción (Agencias)
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