«Truco o trato» es lo que se dice cuando acudes disfrazado a las puertas de tus vecinos para que te den chucherías en Halloween. La fiesta, importada del mundo anglosajón e integrada cada vez más en nuestra cultura, puede resultar especialmente estresante para niños con autismo. Por ello, una madre de Ewa Beach, en Hawai, ha puesto en marcha una iniciativa que facilite a los demás a relacionarse con niños con autismo y, de paso, crear conciencia sobre un trastorno que no todos saben como abordar.
El hijo de Omairis Taylor, de 3 años, tiene autismo y no se comunica de manera verbal. Para él, decir «truco o trato» es prácticamente imposible y tener que explicar su condición a todos los vecinos a los que llaman a la puerta hace que la situación se haga estresante.
La manera que esta madre ha encontrado para solucionar este pequeño problema es lanzar una iniciativa en redes sociales: calabazas azules.
La publicación, que actualmente cuenta con 33.000 acciones y se ha compartido más de 120.000 veces en menos de 24 horas explica que niños con autismo, como el suyo, lleven una calabaza pintada de azul para ayudar en el intercambio de los niños con los adultos.
Esta iniciativa está basada en otras que otros padres han llevado a cabo para alertar, por ejemplo, de alergias alimentarias graves. La idea es no generar frustración si un niño no dice «truco o trato».
Estas son otras acciones que otros padres se animaron a compartir en la publicación de Omairis con el mismo fin:
Redacción (Agencias)