El músico de Long Branch (Nueva Jersey) apareció por sorpresa en el festival benéfico “Light of Day” de Asbury Park, en su estado natal para recaudar fondos contra el párkinson y otras enfermedades neurodegenerativas.
The Boss regresó con su mítica guitarra «Fender» amarilla al teatro Paramount cinco años después de su última aparición en este festival. Lo hizo junto a emblemáticas figuras de Asbury Park como Jesse Malin, Willie Nile o Joe Grushecky.
Los organizadores del festival aseguran que en estos 20 años han recaudado cerca de 6.000 millones de dólares para luchar contra el párkinson y otras patologías en Estados Unidos, una labor que el propio Springsteen agradeció y alabó en su intervención final.
Redacción (Agencias)