El huracán surcoreano de «Parásitos» hizo historia hoy en los Óscar con cuatro galardones, incluidos los de mejor película y mejor director, en una gala en la que los nominados españoles Antonio Banderas, «Dolor y gloria» y «Klaus» se quedaron con la miel en los labios.
En uno de los años de cine de mayor calidad de los últimos tiempos, los Óscar se arrodillaron llenos de admiración ante el descomunal fenómeno de «Parásitos», una comedia negra sobre la desigualdad y el lado más turbio del capitalismo que se convirtió hoy en la primera cinta en un idioma diferente al inglés en llevarse el Óscar a la mejor película y también el de mejor cinta internacional.
Ni Martin Scorsese, ni Quentin Tarantino, ni Sam Mendes: nadie pudo frenar a Bong Joon-ho y a una «Parásitos» que ya figura con honor en los anales del cine.
«Estoy sin palabras. Nunca nos imaginamos que esto sucedería. Estamos muy felices», afirmó Sin-ae Kwak, productora de «Parásitos», ante un Dolby Theatre puesto en pie.
«Siento que un momento muy oportuno en la historia está sucediendo ahora mismo«, añadió.
Aunque los ojos de todos estaban puestos en Bong Joon-ho, el gran cerebro de «Parásitos» y el artífice de que, además de mejor película y mejor dirección, también se llevara las distinciones de mejor película internacional y mejor guion original.
Del Festival de Cannes a los Óscar, pasando por los Globos de Oro o los Bafta, «Parásitos» ha logrado convencer a la industria de Hollywood de que hay vida más allá de los países angloparlantes, todo un mérito para una cinta que en EE.UU. se vio con subtítulos y que recaudó en todo el mundo 165 millones de dólares.
«Érase una vez… en Hollywood«, «Joker» y «Le Mans ’66» obtuvieron dos premios por cabeza, mientras que la gran derrotada de la velada fue «El irlandés» de Martin Scorsese: aterrizó en los Óscar con diez nominaciones, pero no se llevó ni una estatuílla.
En las categorías de interpretación no hubo sorpresas.
Joaquin Phoenix logró el Óscar al mejor actor por su impresionante «Joker», una categoría en la que Antonio Banderas estaba nominado por su delicado trabajo en «Dolor y gloria».
«Creo que hablemos de la desigualdad de género, del racismo, los derechos queer, de las personas indígenas o de los animales, estamos hablando de la lucha contra la injusticia», afirmó Phoenix, un incansable activista medioambiental.
También cumplió con lo prometido Renée Zellweger, que confirmó su regreso por todo lo alto a los grandes focos de Hollywood con su Óscar a la mejor actriz por «Judy»
«Judy no recibió este premio en su momento, así que tomaré este instante como una extensión de la celebración de su legado», dijo en homenaje a Judy Garland.
Otros dos premios que parecían cantados de antemano eran los de actriz y actor de reparto para Laura Dern por «Historia de un matrimonio» y Brad Pitt por «Érase una vez… en Hollywood», respectivamente.
Pitt dio unas sentidas gracias a Quentin Tarantino, a quien definió como alguien «original y único en su especie». «La industria del cine sería un lugar mucho más árido sin ti», aseguró.
Y Dern dedicó el reconocimiento a sus padres Diane Ladd -que la acompañaba- y Bruce Dern.
«Algunos dicen que nunca conoces a tus héroes, pero yo digo que si eres realmente bendecida los tienes como tus padres», expresó.
«Joker» no solo se anotó el galardón de Phoenix sino que hizo historia con el premio a la mejor banda sonora para Hildur Guðnadóttir, la primera mujer en lograr este galardón en las 92 ediciones de los Óscar.
«A las chicas, a las mujeres, a las madres, a las hijas, que escucháis la música burbujeando en vuestro interior, por favor hablad en alto. Necesitamos escuchar vuestras voces», indicó.
Los nominados españoles se fueron de vacío: además de Antonio Banderas, «Dolor y gloria» de Pedro Almodóvar no pudo ganar el Óscar a mejor película internacional, que fue para «Parásitos»; y «Klaus» de Sergio Pablos cayó ante «Toy Story 4» por el galardón a mejor cinta animada.
El cine latinoamericano tampoco celebró ningún Óscar.
La brasileña Petra Costa estaba nominada al mejor documental por «La democracia en peligro»; la mexicana Mayes C. Rubeo optaba al Óscar a mejor vestuario por «Jojo Rabbit»; el mexicano Rodrigo Prieto buscaba el premio a mejor fotografía por «El irlandés»; y los argentinos Pablo Helman, Leandro Estebecorena y Nelson Sepúlveda no ganaron por los efectos especiales de esa misma cinta