La mítica Tiffany de Nueva York, la joyería sobre cuyo escaparate desayunaba Audrey Hepburn en «Desayuno con diamantes», se ha hecho con un diamante de 80 quilates cuyo objetivo final es reeditar el histórico collar que fue presentado en 1939 en la EXPO de Nueva York.
Según destacan desde la firma, esta joya es la más cara que la joyería ha puesto en venta en toda su historia. No obstante, para poder apreciarla en todo su esplendor tendremos que esperar al año que viene, cuando está previsto que Tiffany reabra sus puertas tras dos años cerrada por remodelación.
En su original protagonizado por una aguamarina, en su reedición deslumbrará engarzado este diamante de 80 quilates de peso, de forma oval: el mayor que Tiffany ha sacado a la venta en sus casi dos siglos de historia, y el segundo de mayor valor tras el incalculable Tiffany Diamond, que está fuera de catálogo.
La gemóloga jefe de Tiffany & Co, Victoria Reynolds, no imagina una forma mejor como reclamo para la reapertura de la tienda insignia de la compañía que hacerlo mostrando este “increíble collar”, una de las más fascinantes piezas que se pudo ver en 1940 en la inauguración del emplazamiento del nuevo edificio de Tiffany en la Quinta Avenida. Para Reynolds, este collar es un fiel reflejo del legado y de la historia de la marca joyera de lujo por excelencia de la ciudad de los rascacielos.
Desde el primer día, Tiffany, ha comprado numerosas piedras preciosas para la creación de sus excepcionales diseños de joyas. Entre ellos se encuentra el mítico Tiffany Diamond, un ejemplar único de diamante amarillo por su calidad y tamaño; la Esmeralda Hooker o los diamantes Mazarin, adquiridos por subasta en 1887 y que formaban parte de la colección de Joyas de la Corona francesa.