Una granja de Alemania apuesta como tratamiento alternativo para combatir la soledad y el aislamiento provocado por la pandemia del Covid-19 una curiosa opción: abrazar ovejas y ocas.
Esta idea surgió en la cabeza de una granjera tras comprobar que muchas personas le confesaban el difícil momento que estaban a travesando a raíz del confinamiento y las restricciones que impiden la movilidad y dificulta ver a familiares y seres queridos.
Según revela la granjera, sólo el hecho de entrar en contacto con los animales en un entorno natural «lejos del bombardeo informativo, mascarillas y restricciones», de alguna manera, sana a los visitantes. La iniciativa le ha servido también para sacar adelante a los 29 animales que viven en sus instalaciones, ya que la ayuda se ofrece a cambio de un donativo, a libre elección del visitante.