El hielo marino en las regiones costeras del océano Ártico puede estar adelgazando hasta el doble de rápido de lo que se pensaba, según un nuevo estudio dirigido por investigadores de University College de Londres (Reino Unido).
El espesor del hielo marino se deduce midiendo la altura del hielo sobre el agua y ello se distorsiona por la nieve que pesa el témpano de hielo. Los científicos emplean para ello un mapa de la profundidad de la nieve en el Ártico que está décadas desactualizado y no tiene en cuenta el cambio climático.
En el nuevo estudio, publicado este viernes en la revista ‘The Cryosphere’, los investigadores cambiaron este mapa por un nuevo modelo informático diseñado para calcular la profundidad de la nieve a medida que varía año tras año y concluyeron que el hielo marino en regiones costeras clave del Ártico se estaba derritiendo a un ritmo que era de 70% a 100% más rápido de lo que se pensaba.
«El espesor del hielo marino es un indicador sensible de la salud del Ártico. Es importante, ya que el hielo más grueso actúa como una manta aislante, impidiendo que el océano caliente la atmósfera en invierno y protegiendo el océano del sol en verano. El hielo más delgado también tiene menos probabilidades de sobrevivir durante el deshielo del verano ártico», apunta Bobbie Mallett, doctorando de la University College de Londres que dirigió el estudio.
Redacción