Antes del mes de marzo del año pasado, nadie podía imaginar que íbamos a presenciar una emergencia sanitaria global que cambiaría por completo nuestros hábitos de vida. Desde la forma de trabajar o estudiar hasta la de cómo acudir al médico o hacer trámites administrativos, hábitos donde imperaba la presencialidad y que ahora han mudado al entorno digital.
Con estos cambios, las empresas de todo el planeta están descubriendo las ventajas del uso de las herramientas de colaboración por vídeo para conectar a personas y equipos. Y es que, antes de 2020, solo el 5% de los empleados de oficina trabajaban a distancia, y lo hacían a tiempo parcial. Durante la pandemia, según los datos del Adecco Group Institute esta cifra ha aumentado un 74% con respecto a los registros de antes de la emergencia sanitaria.
Pero, ¿Qué pasará a partir de que alcancemos la deseada barrera de la inmunidad de grupo? ¿Asistiremos a una vuelta a modelos tradicionales basados en la presencialidad en el puesto de trabajo?, ¿servirá esta prueba para implementar modelos de trabajo más flexibles en los que la presencialidad y trabajo en remoto convivan de forma habitual en las jornadas de trabajo?
Escucha todo lo que nos ha contado María Gras, responsable de negocio de videocolaboración en España y Portugal de Logitech.
