El cantante Bruno Mars estaba invitado a una lujosa y multitudinaria boda, donde ha actuado para el resto de invitados.
El pasado fin de semana se casaba Troy Brown, el hijo del director ejecutivo de Motorola, Greg Brown, con Kristin Ryan. La celebración ha reunido a la élite de Nueva York en Cape Cod, Massachusetts.
Entre las muchas sorpresas de este enlace, estuvo la actuación estelar de Bruno Mars.
Una celebración multitudinaria
Si bien se desconoce el coste de la celebración, se estima que ascendió a varios millones de dólares. Y es que no escatimaron en gastos, para una celebración por todo lo alto.
Así, tuvo lugar en el lujoso Chatham Bars Inn, un hotel de lujo cerca de Boston. Además, la organización corrió de la mano de Marcy Blum, una de las más prestigiosas organizadoras de bodas, que ha trabajado para clientes de la talla de Billy Joel y Katie Lee, LeBron y Savannah James, Fabiola Beracasa y miembros de la familia Rockefeller, entre otros.
Tampoco se escatimó en cuanto a la gastronomía. De este modo, empezaron con una cena de ensayo a cargo del chef Mario Carbone.
Poco después, los novios hacían su primer baile, bajo un techo completamente cubierto de flores.
El baile
Fue en ese momento en el que tomó los mandos una banda de música, que hizo que los invitados saltasen a la pista de baile. Eso sí, para poder disfrutar de la última parte de este evento tenían que llegar hasta un bar clandestino secreto, al que solo podían ingresar con la contraseña «Magic», en referencia a la canción de Bruno Mars «24K Magic«.
Ya en el interior de este espacio clandestino, el mismo Bruno Mars subía al escenario para actuar ante los invitados.
Los afortunados invitados deben haberse llevado una gran sorpresa al ver que Bruno Mars cantaría solo para ellos. Varios artistas suelen hacer esto en algunas ocasiones, pero su precio no suele ser nada económico, y más si se trata de una figura consagrada. En el caso de Mars, su actuación rondó aparentemente los 3 millones de dólares.
Redacción