Las altas temperaturas afectan negativamente a la mayor capa de hielo del mundo que se encuentra en La Antártida Oriental. Todo ello se debe a las altas emisiones de gases de efecto invernadero que son una verdadera amenaza para el futuro del planeta y cuyo descontrol podría elevar el nivel del mar hasta cinco metros.
Esta gran capa de hielo tiene una altura de 52 metros sobre el nivel del mar y se ha descubierto que es muy vulnerable ante el cambio climático. El estrechamiento y retroceso es especialmente visible en las zonas que se encuentran en contacto directo con las corrientes cálidas del océano.
Los cambios serán más visibles dentro de unas décadas, según los expertos. Las consecuencias serán drásticas y las zonas costeras serán las más afectadas. El deshielo podría evitarse si las temperaturas no aumentaran más de 2 ºC en los próximos años.
Entre los años 2011 y 2020 los glaciares en Pirineos perdieron su espesor de casi 7 metros y 20% de espesor. Este año ha sido extremo debido a las altas temperaturas que han afectado a las zonas altas y que no se habían visto en años anteriores.
Redacción (Agencias)