El festival de música reggae más multitudinario de Europa, el Rototom Sunsplash, vuelve este martes a Benicàssim, tras dos años de parón por la pandemia, con ganas de cambiar el mundo en una cita multicultural, familiar, sostenible y reforzada en su seguridad tras la tragedia del Medusa de Cullera.
Entre el 16 y el 22 de agosto, el Rototom celebrará su vigésima séptima edición con 73 horas de música y más de 80 conciertos y sesiones en sus seis escenarios, con una oferta de actividades, charlas y talleres distribuidos por una decena de áreas culturales y de ocio. Además, tendrá 40 propuestas gastronómicas internacionales capaces de llevar al paladar el viaje por el mundo que es en sí mismo Rototom Sunsplash, una cita a la que no falta un público fiel que vendrá de 77 países.
Las instalaciones del Rototom -que son las mismas que las que acogen en julio el FIB- ya se reforzaron en 2019 a raíz de un episodio de fuertes vientos que hubo entonces, pero ahora, tras el vendaval que asoló el Medusa la madrugada del pasado sábado y que dejó un muerto y docenas de heridos, se está reforzando aún más toda la infraestructura, tanto escenarios como elementos de escenografía.
La apertura del Rototom Sunsplash al afrobeats aterrizará con Davido y no faltarán el ska (The Skatalites), el dub (O.B.F.), el dancehall (Sean Paul), el hip hop (Mala Rodríguez) o la cumbia, con La Dame Blanche.
Redacción (Agencias).