Los chimpancés adolescentes pueden ser menos impulsivos que los humanos de su misma edad, aunque compartan con ellos algunos comportamientos arriesgados, según una investigación de la Asociación Estadounidense de Psicología. Aunque los chimpancés adolescentes se enfrentan, en cierto sentido, a la misma tempestad psicológica que los adolescentes humanos.
Los autores de la investigación descubrieron que varias características clave de la psicología adolescente humana también se observan en nuestros parientes primates más cercanos, cuyo ADN coincide en un 98,6 % con el del hombre.
La adolescencia de los chimpancés, que pueden vivir hasta los 50 años, se da entre los 8 y los 15 años y al igual que los humanos, muestran cambios rápidos en los niveles hormonales, comienzan a formar nuevos lazos con sus compañeros, se hacen más agresivos y compiten por el estatus social.
En la primera prueba los chimpancés adolescentes y adultos podían elegir entre dos recipientes: uno contenía siempre cacahuetes, un alimento que les gusta mucho, y el otro o una rodaja de pepino, que no les agrada, o una rodaja de plátano, que les encanta. Los chimpancés podían ir a lo seguro y obtener los cacahuetes o bien arriesgarse por algún codiciado plátano a riesgo de terminar con un pepino poco apetecible. Durante varias rondas de la prueba, los chimpancés adolescentes eligieron la opción arriesgada con más frecuencia que los adultos, pero ambos tuvieron reacciones negativas similares cuando recibieron pepino.
Los adolescentes humanos tienden a ser más impulsivos que los adultos, por lo que es más probable que acepten la recompensa inmediata, dice la investigación. El comportamiento arriesgado tanto en los chimpancés adolescentes como en los humanos parece estar profundamente arraigado biológicamente, pero el aumento del comportamiento impulsivo puede ser específicos de los adolescentes humanos.
Redacción (Agencias).