La energía eólica y la solar han logrado generar la quinta parte de la electricidad de la UE en 2022. De este modo, han superado por primera vez al gas en un sector dominado por la nuclear y la hidroeléctrica, según los datos publicados por el centro de pensamiento sobre energía Ember.
«Europa ha evitado lo peor de la crisis energética», ha resumido el comunicado emitido por Dave jones, el responsable de Perspectivas de Datos de Ember, Dave Jones. Además, ha agregado que «los ‘stocks’ de 2022 sólo causaron una pequeña onda expansiva en la producción de electricidad a partir del carbón y una enorme ola de apoyo a las renovables» por lo que «cualquier temor a un repunte del carbón ya ha muerto».
Pese a que la crisis energética revitalizó la generación con carbón, el incremento de ese combustible fósil para producir electricidad fue sólo de 1,5 puntos respecto al año anterior, hasta el 15,99 % de la electricidad del bloque comunitario y con una tendencia a reducirse un 6 % en los últimos cuatro meses del 2022.
De hecho, las 26 centrales de carbón puestas en situación de emergencia han funcionado a una media del 18 % de su capacidad y sólo se utilizó un tercio de los 22 millones de toneladas adicionales de carbón importadas en la UE el pasado año.
Pese a todo, las emisiones de dióxido de carbono de la generación eléctrica en la UE aumentaron un 3,9 % (26 millones de toneladas de CO2), con los mayores incrementos absolutos registrados en Alemania (13 MtCO2, +6,1 %), España (7,6 MtCO2, +19 %), Italia (6,9 MtCO2, +9.3%) y Bulgaria (4,7 MtCO2, + 23%) pero un descenso en Polonia, el segundo mayor emisor de la UE (-3,7 MtCO2, -2,9 %).
Redacción (Agencias)