El 16 de abril de 1973 fallecía en un accidente de tráfico Nino Bravo. El cantante valenciano, acompañado por su guitarrista y amigo José Juesas Francés y el Dúo Humo, partieron temprano de Valencia a Madrid.
Aunque se propuso viajar en avión, finalmente decidió hacerlo en el coche de segunda mano recién adquirido por Nino en Valencia, un BMW 2800 L de 1970.
Tras repostar y desayunar en la localidad conquense de Motilla del Palancar, poco antes de las diez de la mañana prosiguieron camino. A pocos kilómetros, a la altura del término municipal de Villarrubio, el coche, que conducía Nino, se salió de la carretera en una curva donde un mes antes ya se había producido un accidente mortal.
Nino y los heridos fueron trasladados en varios vehículos particulares a Tarancón, situado a 13 kilómetros. Sus primeras curas las recibieron en un pequeño hospital de monjas y fueron trasladados con la única ambulancia que disponía el pueblo a Madrid, que se encontraba a poco menos de 100 kilómetros. Sin embargo, el cantante moriría a escasos kilómetros de la capital y entró fallecido al Centro Sanitario Francisco Franco, el actual Gregorio Marañón.
Su entierro en Valencia tuvo una masiva asistencia, con más de 10.000 personas. Y es que Nino falleció con apenas 28 años y tenía ante sí una carrera muy prometedora, gracias a una gran e inigualable voz.
Redacción