A la hora de dar el «sí quiero», la novia se siente libre y abandona los estereotipos románticos, prefiere un diseño blanco, atrevido, con detalles artesanales y aderezos de fiesta, según se ha visto este martes en la décima edición de la pasarela nupcial Atelier Couture.
La novia actual llega al taller «con mucha ilusión y muchos nervios», ha dicho la diseñadora Lorena Formoso, encargada de abrir esta nueva edición en el madrileño Palacio de Santoña, donde ha presentado una colección con materiales atípicos como las lentejuelas o lana «mohair».
Sobre la pasarela se han visto creaciones que huyen de lo convencional y «nacen desde el amor y la pasión por los detalles», ha contado la diseñadora gallega afincada en Madrid que trabaja siluetas contemporáneas y tejidos de calidad.
Por su parte el cordobés Francisco Tamaral ha destacado que «muchas novias se conocen y llegan al taller con algunas referencias y una idea preconcebida, otras prefieren dejarse aconsejar». Este diseñador con veinticinco años de profesión ha presentado en esta plataforma vestidos raciales con ADN andaluz junto a otras creaciones más románticas con detalles de nido de abeja y encaje de bolillos.
Redacción (Agencias)