El cambio climático probablemente afectó a las poblaciones humanas del centro de Europa durante el Neolítico y la Edad del Bronce, puesto que las poblaciones aumentaron en épocas cálidas y húmedas, y disminuyeron en periodos fríos y secos, cuando, además, se incrementaron las desigualdades sociales.
Esa es la principal conclusión de un estudio realizado por tres investigadores de la Universidad de Kiel (Alemania) y publicado en la revista ‘PLOS ONE’.
El registro arqueológico es un recurso valioso para explorar la relación entre los seres humanos y el medio ambiente, en particular cómo cada uno se ve afectado por el otro.
En el nuevo estudio, los investigadores examinaron regiones de Europa central ricas en restos arqueológicos y fuentes geológicas de datos climáticos, y utilizaron estos recursos para identificar correlaciones entre las tendencias de la población humana y el cambio climático.
Las tres regiones examinadas son la región de Circumharz (centro de Alemania), Baja Austria (noreste de Chequia) y el Foreland alpino (sur de Alemania).
Los investigadores reunieron más de 3.400 dataciones de radiocarbono publicadas de sitios arqueológicos en estas regiones para que sirvieran como indicadores de poblaciones antiguas, siguiendo la lógica de que hay más disponibles en poblaciones más grandes que dejan más materiales.
Redacción (Agencias)