Científicos de dos instituciones suizas de investigación han concluido en un estudio que el uso frecuente de teléfonos móviles puede reducir, por las ondas electromagnéticas que emiten, la concentración de espermatozoides en el semen del hombre, y con ello las probabilidades de fecundar un óvulo y tener hijos.
No obstante, el estudio a cargo de la Universidad de Ginebra (Unige) en colaboración con el Instituto Suizo de Salud Pública y Tropical (Swiss TPH) también ha concluido que ese uso de los celulares no afecta a la morfología de los espermatozoides ni a su motilidad (su capacidad de moverse de forma autónoma).
Se descubrió que los jóvenes que utilizaban poco el celular (apenas una vez a la semana) tenían una concentración promedio de 56,5 millones de espermatozoides por mililitro de semen, un 21 % mayor que la de los que usaban su teléfono más de 20 veces al día, que era de 44,5 millones de espermatozoides por mililitro. Según la Organización Mundial de la Salud, por debajo de los 40 millones de espermatozoides por mililitro se reducen las probabilidades de concebir, y se vuelven muy bajas por debajo de los 15 millones.
El estudio también concluye que la posición del celular con respecto al cuerpo (por ejemplo, si es frecuentemente guardado en el bolsillo del pantalón) no influye en la mayor o menor concentración de espermatozoides. Sin embargo, las conclusiones al respecto no son tan robustas ya que el número de jóvenes que no lo transportaban en sus bolsillos era mucho menor.
Redacción (Agencias).