La revolución que las observaciones del telescopio James Webb han supuesto para la ciencia del Cosmos empieza a dar sus frutos. Un equipo de investigadores liderados por el Centro de Astrobiología ha descubierto la galaxia similar a la Vía Láctea más lejana de las observadas hasta ahora, revelando que el Universo estaba más organizado de lo que se pensaba desde una era temprana.
El hallazgo muestra una galaxia que forma una espiral en torno a una barra de estrellas (similar a la imagen de la Vía Láctea) que se habría formado hace 11.700 millones de años, cuando el universo solo contaba con 2.100 millones de años, el 15 % de su edad actual que se calcula en 13.800 millones de años.
El descubrimiento desmonta la concepción de que la estructura de las galaxias espirales, como la Vía Láctea, no se habría consolidado hasta que el universo alcanzó la mitad de su edad actual. Se considera una galaxia espiral barrada “porque presenta una especie de brazos espirales que giran alrededor de una zona central, donde hay una estructura de estrellas en forma de barra. Y lo más peculiar es que la galaxia tiene la misma cantidad de estrellas que en este momento del universo tenía nuestra galaxia. El 70 % de las galaxias conocidas hasta ahora en el universo cercano tienen esa estructura espiral.
Redacción (Agencias).