Una inteligencia artificial puede analizar datos sobre residencia, educación, ingresos, salud y condiciones de trabajo para predecir acontecimientos en las vidas de las personas, incluso estimar la probabilidad de mortalidad prematura o los matices de la personalidad.
Un estudio que publica Nature Computational Science demuestra que si se usa una gran cantidad de datos para entrenar a «modelos transformadores», estos pueden organizar la información y «predecir qué ocurrirá en la vida de una persona e incluso estimar el momento de su muerte».
El proyecto reúne a científicos de la Universidad Técnica de Dinamarca y la Universidad Northeastern (EE.UU.) que analizaron datos de salud y vinculación al mercado laboral de seis millones de daneses en un modelo denominado life2vec.
El equipo señala que este sistema está «rodeado de cuestiones éticas» y desafíos que deben entenderse «más profundamente antes de que el modelo pueda usarse», por ejemplo, para evaluar el riesgo de un individuo de contraer una enfermedad.
Tras entrenar el modelo aprendiendo los patrones de los datos, demostraron que supera a otras redes neuronales avanzadas y predice resultados como la personalidad y la posibilidad de la muerte «con gran precisión», señaló la Universidad de Dinamarca en un comunicado.
El sistema pudo predecir la probabilidad de que las personas de una cohorte de entre 35 y 65 años sobrevivieran durante los cuatro años siguientes al 1 de enero de 2016, o captar los matices de la personalidad mejor que los modelos más avanzados, superándolos en al menos un 11 %, explicó Nature Computational Science.
Los investigadores indican que life2vec está rodeado «de cuestiones éticas», como la protección de datos confidenciales, la privacidad y el papel del sesgo en los datos. Además «abre importantes perspectivas positivas y negativas que debatir y abordar políticamente».
Redacción · EFE
Fotografía · Getty Images