2,6 millones de niños, niñas y adolescentes en nuestro país están en riesgo de pobreza y exclusión social y en uno de cada cuatro casos la pobreza es crónica. Aldeas Infantiles SOS alerta de esta emergencia silenciosa con graves consecuencias para el presente y el futuro de la infancia y la adolescencia y ha reactivado su campaña #EmergenciaEnCasa, que trata de sensibilizar a la sociedad y apoyar a familias con hijos e hijas a las que la subida de precios ha puesto en una situación límite.
Con esta campaña la organización recauda fondos para compensar las desigualdades que sufren los niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad socioeconómica, mediante la ayuda directa a sus familias para hacer frente a gastos alimenticios, energéticos y educativos, además de facilitar apoyo psicosocial y en materia de salud mental.
Si bien los últimos datos oficiales revelan que se ha reducido ligeramente el número de niños, niñas y adolescentes en riesgo de pobreza o exclusión social en España, también muestran que han aumentado los que experimentan carencias materiales severas, así como las cifras de aquellos que no pueden permitirse comer carne o pescado al menos cada dos días y mantener la vivienda a una temperatura adecuada.
“Sostener una dieta equilibrada con pocos recursos no es fácil“, explican desde la organización. “Las familias que tienen dificultades para llegar a fin de mes, a menudo se ven obligadas a consumir alimentos más baratos y menos saludables para poder alimentar a sus hijos e hijas; no es casual que la obesidad infantil se duplique en los hogares con niveles más bajos de renta“.
Asimismo, el 49 % de los niños, niñas y adolescentes que habitan viviendas de alquiler de precios bajos viven con temperaturas inadecuadas, el 40 % de los hogares en riesgo de pobreza tiene goteras y el 15 % carece de la iluminación adecuada1. La pobreza energética tiene implicaciones para la salud, la educación y la nutrición de los niños, niñas y adolescentes.
Aldeas Infantiles SOS asegura que el riesgo de pobreza y exclusión social también está directamente relacionado con una mayor probabilidad de sufrir problemas de salud mental en la infancia que afectan a su desarrollo. “Los hogares que están expuestos a una situación continuada de falta de recursos y dificultades socioeconómicas viven situaciones estresantes de forma frecuente, en ocasiones estrés crónico, lo que hace a los niños y niñas especialmente vulnerables a trastornos de salud mental como ansiedad, depresión o problemas de conducta, entre otros“.
Por último, la brecha digital, las limitaciones de recursos y capacidades para apoyar el aprendizaje en casa, así como las dificultades de conciliación, también comprometen el derecho de estos niños, niñas y adolescentes a una educación de calidad y condicionan su futuro. “La pobreza durante la infancia reduce las oportunidades de alcanzar un nivel alto de estudios, acarrea más precariedad laboral y un riesgo mayor de sufrir enfermedades, tanto físicas como mentales”, sostienen desde Aldeas Infantiles SOS.
La respuesta de Aldeas
Aldeas Infantiles SOS trabaja con niños, niñas y familias en situación de vulnerabilidad derivadas por los Servicios Sociales. A aquellas que lo necesitan, les proporciona ayuda para afrontar sus gastos energéticos y para que puedan garantizar la alimentación de sus hijos e hijas. Además, trabaja con ellas la educación alimentaria y la gestión económica y organizativa, dándoles a conocer alternativas para comprar de forma saludable y para elegir alimentos de calidad con la máxima optimización de recursos.
Por otra parte, la organización facilita material escolar, libros de texto, así como ropa, calzado, artículos de higiene y ayuda para el transporte escolar a las familias con dificultades para cubrir los gastos educativos de sus hijos e hijas. “En nuestros Centros de Día proporcionamos refuerzo escolar y acceso a dispositivos digitales con el fin de reducir la brecha educativa y digital, además de meriendas, juegos, tutorías individuales, salidas culturales y de ocio, y talleres educativos“, detallan desde la organización.
Aldeas también ofrece apoyo emocional y atención psicológica a niños, niñas, adolescentes y jóvenes que viven situaciones difíciles a nivel personal o familiar, así como asesoramiento psicológico para adultos.
“Trabajamos para que el derecho a una buena salud mental sea una realidad para los niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad. Los acompañamos en su proceso de recuperación emocional y les ofrecemos las herramientas necesarias para manejar sus emociones y hacer frente a las adversidades“, concluyen.
Esta Navidad, la campaña #EmergenciaEnCasa contribuirá a compensar las desigualdades que sufren más de dos millones y medio de niños, niñas y adolescentes en nuestro país.
Para colaborar con la campaña #EmergenciaEnCasa:
- Transferencia a ES79 0049 0001 5321 1003 3332
- A través de www.aldeasinfantiles.es
- Bizum al número 33347