Sevilla ha cumplido este viernes la tradición que mantiene desde hace años y ha entregado al embajador del Reino Unido en España, Hugh Elliot, las naranjas cultivadas en los jardines del Real Alcázar para la familia real británica, con las que elaboran la tradicional mermelada de naranja amarga.
El alcalde, José Luis Sanz, ha entregado al embajador veinte kilos de las miles de naranjas que se han recolectado solo en los jardines del Alcázar de Sevilla.
Esta tradición proviene de la Reina Victoria Eugenia, nieta de la reina Victoria de Reino Unido y nacida en la residencia de verano de la familia real británica en Balmoral.
Desde entonces, la mermelada de los naranjos amargos de Sevilla es «tan apreciada no solo por la familia Windsor, sino por todo el pueblo británico, de la que forma parte de su alimentación cotidiana y que lleva el nombre de esta ciudad a sus mesas”.
Sanz ha trasladado al embajador el deseo de una «pronta y plena recuperación al Rey Carlos III» y la invitación a Sevilla en la que sería su primera visita como monarca, ya que como Príncipe de Gales vino en más de una ocasión.