El reloj biológico tiene un impacto significativo en el rendimiento de los jugadores de la liga profesional de baloncesto en Estados Unidos, conocida como NBA, con lo que los husos horarios y el cansancio repercuten en el resultado de los partidos.
Así se desprende de un estudio dirigido por investigadores de las universidades Dokuz Eylül y Técnica de Yildiz (Turquía) a partir de más de 25.000 partidos publicado este miércoles en la revista ‘Chronobiology International’.
La investigación, la primera de su tipo, se basa en victorias en casa y como visitantes de jugadores de la durante 21 temporadas consecutivas. Considerados los más competitivos del mundo, estos baloncestistas viajan con frecuencia por las cinco zonas horarias de Estados Unidos para disputar sus encuentros.
Los hallazgos muestran que hay cerca de un 10% más probabilidad de victoria para los equipos locales del oeste cuando juegan como locales contra un conjunto del este, lo que no sucede a la inversa.
Así, el porcentaje de partidos ganados de equipos del oeste es del 63,5% cuando juegan en casa contra un club del este. Al revés, el porcentaje es del 55,0%.
Además, los equipos ganan más partidos en casa cuando los ciclos de sueño y vigilia de los jugadores, vinculados a su ritmo circadiano, están ‘por delante’» de la hora local. Esto sucede tras haber regresado al oeste después de competir en una ciudad más al este, donde la hora local es más temprana.
Redacción · Servimedia
Fotografía · USATSI