Será a las 22:51 cuando llegue el verano, que terminará el próximo 22 de septiembre dando paso al otoño.
El inicio del verano en España se producirá oficialmente a las 22:51 (hora peninsular) del próximo jueves, 20 de junio, según el Observatorio Astronómico Nacional. Esta estación durará 93 días y 16 horas, y terminará el próximo 22 de septiembre, momento en el que llegará el otoño.
El pistoletazo de salida del verano en el hemisferio norte está definido por el instante en que la Tierra pasa por el punto de su órbita desde el cual el Sol presenta su máxima declinación norte. El día en que esto sucede el astro rey alcanza su mayor elevación sobre el horizonte al mediodía y describe en el cielo el arco más largo. Como resultado, se trata del día más soleado del año.
Además, durante varios días la altura máxima del Sol al mediodía parece no cambiar. Es por ello que, al comienzo del verano también se le llama solsticio de verano (del latín «solstitium», esto es, «sol quieto»). En este instante, en el hemisferio sur se inicia el invierno.
El Observatorio Astronómico Nacional ha señalado en un informe sobre la estación estival, que el comienzo del verano puede darse, a lo sumo, en tres fechas distintas del calendario (20, 21 o 22 de junio), aunque durante el siglo XXI solo se producirá el 20 o el 21 de junio.
El próximo 5 de julio sucederá el momento de máximo alejamiento anual entre la Tierra y el Sol, denominado afelio. Cuando esto pase, la distancia entre el planeta y la estrella será de algo más de 152 millones de kilómetros, es decir, unos cinco millones de kilómetros más que en el momento de menor distancia (perihelio), que sucedió el 3 de enero.
Estación más larga
Por otra parte, el verano en el hemisferio norte es la estación más larga del año debido a que la órbita de la Tierra alrededor del Sol no es circular, sino elípitca, y el periodo estival coincide con la época del año en la que la Tierra se encuentra más lejos del Sol. Cuando esto sucede, la Tierra se mueve más despacio en su órbita y, por tanto, necesita más tiempo para llegar al punto donde comienza la siguiente estación, que es el otoño.
Aunque el día del solsticio de verano corresponde al de mayor número de horas de Sol, la diferencia de horas entre el día y la noche depende de la latitud del lugar. Para la de Madrid, el día del solsticio de verano tendrá 15 horas y 3 minutos de Sol, por las 9 horas y 17 minutos de Sol que tuvo el día más corto. La diferencia entre la jornada más larga y la más corta es, por tanto, de casi seis horas de Sol. Esa diferencia disminuye cuanto más cerca del ecuador, mientras que la diferencia es máxima en los polos terrestres.
Planetas, estrellas y muchos ocio
Las noches de verano, aunque cortas, suelen ser las más cálidas del año. No obstante, también supone una buena ocasión para explorar el cielo. Además, en esta época es frecuente viajar al campo o la playa, lugares donde se puede ver mejor el firmamento.
Con la llegada del verano, los días serán más largos, podremos disfrutar de la piscina y del buen tiempo en una terraza con amigos y familiares.
Redacción (Agencias).