Shakira explica sus problemas con Hacienda

La de Barranquilla señala que alcanzó un pacto para proteger a sus hijos y considera que en la estrategia de la administración pública subraye un prejuicio machista.

En una carta publicada en El Mundo, la intérprete de «Hips dont Lie» ha justificado su contencioso tributario con las siguientes palabras: «En 2023 viví rodeada de cámaras que esperaban ansiosamente mostrarle al mundo cómo me quebraba. Nadie se perdió detalle: el juicio de Hacienda, el divorcio mediático… era un espectáculo demasiado jugoso para dejarlo pasar»

«Pero lo más frustrante fue comprobar que una institución del Estado parecía más interesada en quemarme públicamente en la hoguera que en escuchar mis razones. Pues bien, creo ha llegado el momento de darlas», ha añadido la cantante. Shakira admitió que defraudó 14 millones y medio de euros entre los años 2012 y 2014. Es por ello que aceptó el pago de una multa de 7,8 millones a cambio de una rebaja de condena que evitó su entrada en prisión.

La cantante colombiana considera que «una institución creada para el servicio de los ciudadanos no debería utilizar todo su poder y recursos para criminalizar caprichosamente a quien le conviene». «Pero todo el mundo sabe que el romance se vende bien», apostilla.

En esa carta, Shakira también se remonta al inicio de su relación con el exfutbolista Gerard Piqué en 2011. Lo hace para explicar sus continuos viajes a España.

«Siempre que regresaba, lo hacía para que prosperara esa relación, no por vocación de permanencia. Una estrategia en la que además subyace un prejuicio machista», asegura.

Si el cantante hubiera sido un hombre estadounidense, se hubiera enamorado de una española y la visitara regularmente, «me cuesta creer que la Agencia Tributaria hubiera considerado que tenía una intención de arraigo», añade la cantante.

Y denuncia la existencia de «un machismo estructural que da por descontado que una mujer solo puede seguir a un hombre, incluso cuando no le conviene». «Un machismo que sobrevive en sectores de la burocracia estatal en una sociedad que -por suerte- ya piensa muy distinto», agrega.

La cantante considera que algunos técnicos de la Agencia Tributaria española presentaron un «relato infantil y moralista» en el que ella era una cantante que evitaba cumplir con sus obligaciones fiscales y ellos los representantes de la justicia y la decencia. Además opina que la Agencia Tributaria no trata de castigar a quien no cumple, sino de mostrar trofeos de caza para reconstruir una credibilidad en entredicho.

Estas declaraciones llegan ahora porque Shakira se sentía con ganas de hacerlo y porque quería demostrar que la toma de sus decisiones fueron para proteger a sus hijos y no por cobardía ni culpabilidad.

Redacción (Agencias)