La icónica banda de rock británica Pink Floyd ha acordado vender su música ya grabada y sus derechos a Sony Music por cerca de 400 millones de dólares, según ha informado la revista especializada Variety. El acuerdo, calificado como uno de los mayores alcanzados recientemente, aparentemente ya ha concluido tras décadas de conflicto interno entre los miembros del grupo, principalmente entre Roger Waters y David Gilmour.
El pacto incluye los derechos de la música ya grabada y los de nombre e imagen, pero no los de composición, que pertenecen a los autores individuales, precisó Variety. «Probablemente» la mayoría de las ilustraciones de sus álbumes, diseñadas en gran parte por la firma británica Hipgnosis, también se engloban en esa decisión.
Variety recuerda que Sony ha invertido más de 1.000 millones de dólares en los catálogos de intérpretes como Bruce Springsteen y Bob Dylan. Por el de Pink Floyd, según destaca, llegaron a pedirse 500 millones de dólares y el grupo estuvo a punto de llegar a un acuerdo en 2022, pero las diferencias internas acabaron por echar para atrás a algunos interesados.
Redacción (Agencias).