El cocido de Lalín ha traspasado fronteras y ha conquistado a Japón. En la 57ª edición de la feria, el embajador nipón en España, Takahiro Nakamae, ha sido nombrado comendador y pregonero, convirtiéndose en el primer diplomático en recibir este honor. Con un discurso abierto y cerrado en gallego, el embajador confesó su sorpresa inicial ante la propuesta del alcalde Xosé Crespo, que pronto se transformó en «honor y orgullo».
Nakamae recordó su primer encuentro con el cocido hace décadas en un colegio mayor de Valladolid y su intento fallido de cocinarlo, al que bautizó como «takahireña». Finalmente, optó por seguir disfrutándolo como buen «gastrónomo practicante», evocando a Cunqueiro y Pardo Bazán.
La feria, que nació como una fiesta familiar, es hoy una gran romería de interés turístico internacional. En un día frío pero soleado, diez nuevos embajadores del cocido fueron nombrados, entre ellos Javier Moll, Arantza Sarasola, Teresa Portela y Marian Mouriño.
El desfile inicial estuvo marcado por la presencia de Lalaina, una robusta cerda Duroc. La jornada culminó con la degustación del menú estrella: carnes, embutidos, legumbres y grelos, acompañados de filloas y orejas de Lestedo.
Lalín sigue haciendo historia con su cocido y parece no tener fronteras.
Redacción