Un gen canino relacionado con la obesidad humana es descubierto en perros

El gen DENND1B influye tanto en la obesidad canina como en la humana, revelando cómo la genética puede afectar el apetito y el peso corporal.

Un reciente estudio publicado en la revista Science ha identificado el gen DENND1B como el principal responsable de la obesidad en perros, especialmente en los labradores retrievers, y se ha descubierto que también podría tener un impacto similar en los humanos. Este gen afecta una vía cerebral clave para regular el equilibrio energético, conocida como la vía leptina-melanocortina, lo que influye en la forma en que el cuerpo maneja el apetito y el peso corporal.

La investigación también encontró que, aunque otros genes están relacionados con la obesidad canina, DENND1B tiene el mayor efecto. Sin embargo, los investigadores señalan que estos genes no serían los más adecuados para tratamientos farmacológicos para la obesidad, ya que intervienen en procesos biológicos importantes. A pesar de esto, subrayan la relevancia de comprender cómo las vías cerebrales regulan el apetito.

Un hallazgo interesante del estudio es que los perros con mayor riesgo genético de obesidad mostraron un apetito más elevado, similar a lo que ocurre en los humanos. Según las mediciones, estos perros tenían una mayor tendencia a molestar a sus dueños por comida, lo que pone de manifiesto la conexión entre la genética y los comportamientos alimenticios.

Por último, el estudio destaca cómo un control adecuado de la dieta y el ejercicio en perros puede evitar la obesidad incluso en aquellos con alto riesgo genético, algo que también se aplica a las personas. La investigación refuerza la idea de que, si bien la genética juega un papel importante, el ambiente y los hábitos de vida también son determinantes para prevenir la obesidad.

Redacción (Agencias).