Una trabajadora de la centralita telefónica del Hospital Son Llàtzer ha elaborado con ganchillo y algodón natural disfraces de Carnaval para los neonatos ingresados en la Unidad de Neonatología del centro hospitalario.
El objetivo es hacer un poco más agradable «la estancia de los bebés y familiares. De este modo, se busca que los padres se vayan acostumbrando a todos los cuidados que requerirá el bebé y facilita que se adapten a la situación y se favorece el vínculo.
Con esta medidas, ayudan a las madres y los padres a sentirse mejor y a reducir su ansiedad, se mejora la calidad del vínculo con el hijo y la calidad de la interacción, se aporta a los padres facilidades para cuidar a su hijo, se mejora el grado de satisfacción de la experiencia de los padres en la UCI, y se facilita la práctica del método canguro.
Redacción (Agencias)
Fotografía: Hospital Son Llàtzer (Palma de Mallorca)