Una estudiante sudafricana de la Universidad de Ciudad del Cabo ha desarrollado el primer «bioladrillo» del mundo fabricado a partir de orina humana.
El bioladrillo se obtiene a partir de un proceso llamado precipitación carbonatada microbiana, similar al que permite formar las conchas de mar. El producto resultante es mucho más ecológico que los ladrillos tradicionales, que deben ser cocidos a temperaturas de más de 1.000 grados, lo que genera mucho dióxido de carbono.
La creación de bioladrillos con urea tiene precedentes en Estados Unidos pero esta es la primera vez que se hace a partir de orina humana real.
La dureza del material resultante se puede regular en función de las necesidades de uso.
Redacción (EFE)
Fotografía: UCT