Hace más de 3000 años llegaron al Mediterráneo especias asiáticas de hierbas aromáticas como la cúrcuma. Incluso en la Edad de Bronce, el comercio de alimentos a larga distancia ya estaba establecido. El plátano, alimento milenario en el Mediterráneo, era uno de ellos.
El arqueólogo Philipp Stockhammer, perteneciente a la Ludwig-Maximilians-Universität en Munich trabajó con un equipo internacional para analizar los residuos de alimentos en el sarro de los dientes. Descubrió que en el Mediterráneo Oriental se comía cúrcuma, plátanos e incluso soja en la Edad del Bronce, hace unos 3.700 años. Un estudio que se ha publicado en PNAS. “Las especias, frutas y aceites exóticos de Asia llegaron milenios antes de lo que se pensaba. Es la evidencia directa más temprana hasta la fecha de que la cúrcuma, el plátano y la soja fueran de Asia”, dice Stockhammer.
También evidencia que ya en el segundo milenio a. C. ya existía un floreciente comercio a larga distancia de frutas exóticas, especias y aceites. Conectó el sur de Asia y el Levante a través de Mesopotamia o Egipto. Rastrear las raíces de esta globalización naciente ha demostrado ser un problema persistente.
Fotografía · Kapital Stereo (editada)