Los residuos humanos ya afectan a la fauna marina, especialmente en forma de microplásticos. Y es que un estudio realizado con medusas recogidas en la playa de Las Canteras, en Las Palmas de Gran Canaria, ha constatado que casi todas tenían basura en sus tentáculos o dentro de su cavidad gástrica. La mitad también había ingerido microplásticos.
Entre los residuos se detectaron porcentajes altos de fibras de algodón, así como fragmentos de plásticos y restos de redes que empleando los pescadores.
Se trata de la primera vez que se documenta -y se fotografía- en el Atlántico Norte que las medusas están literalmente comiendo plástico.
Para los expertos supone un claro motivo de preocupación al evidenciarse que este tipo basura ya está entrando en la cadena trófica de los océanos. Y es que las medusas son las principales presas de muchos animales, como la tortuga laúd que puede llegar a ingerir diariamente un 73 % de su peso de medusas.