El ojo humano es capaz de distinguir varios millones de colores, en función de las condiciones de observación, pero sólo ve en blanco y negro de noche, durante la que se pueden tener sueños en color.
Éstas son algunas de las curiosidades que ofrece un libro presentado en la X Reunión Nacional de Óptica celebrada esta semana en Zaragoza por uno de sus autores, Manuel Melgosa, catedrático en la Universidad de Granada.
Se podría decir que cada persona ve un color de manera diferente, aunque dentro de los que tienen una visión normal hay una cierta uniformidad, ha agregado Melgosa, al tiempo que ha dicho que el hecho de que la retina, los fotorreceptores y los mecanismos que llegan hasta al cerebro sean personales hace que no se vea exactamente el mismo.
¿Cuál es el mejor color para unas gafas de sol? o ¿por qué no podemos ver los colores de noche? son algunas de las interrogaciones a las que se responde. Así, según ha señalado Melgosa, el mejor color para el cristal de unas gafas de sol depende de la finalidad que se persiga. Si no se quiere alterar el color de los objetos que se ven el gris podría ser una buena opción, pero no la única, ha dicho.
Y en cuanto a la visión del color por la noche, ha explicado que los fotorreceptores de la retina que permiten ver los colores, los conos, sólo se activan cuanto hay cierta cantidad de luz, es decir, lo que denominan visión fotópica. Por ello, los conos dejan de funcionar de noche, momento en el que inician su trabajo otros fotorreceptores, los bastones, que al ser de un único tipo producen una visión en blanco y negro, lo que en realidad implica percibir una amplia gama de estímulos que llaman grises, ha continuado. De ahí viene el dicho popular de que «de noche todos los gatos son pardos»…
Redacción (Agencias)